jueves, 6 de junio de 2013

¿La ùltima universidad?Actualizado




¿La última Universidad? Actualizado
Todos sabemos que cualquier ciudadano con un trabajo intermitente e informal gana varias veces más que un profesor universitario, mejor dicho cualquier ciudadano gana mejor que un profesor universitario. Profesor formado durante toda su vida que ha dedicado sus horas buenas y malas a convocar el conocimiento para reproducirlo y trasmitirlo a mentes frescas dispuestos a mantener esta institución humana que es la formalización del aprendizaje riguroso y la búsqueda de las complejidades del mundo humano y físico.
La universidad en Venezuela se ha erigido históricamente  como espacio y escenario de luchas encarnadas por los horizontes que debe tener el Estado y un poco más sutil la sociedad venezolana. Sabemos que los destinos de una sociedad no pueden ser decretados, a diferencia  de los Horizontes del Estado que  pueden ser dibujados. En algunos momentos las Universidad fue nicho de fundamentalismos políticos, sin embargo si hacemos un balance histórico más allá de las formas, podemos decir, que su ontología es libertaria y anti-hegemónica,  las experiencias históricas con cualquier gobierno lo sustentan.
A pasar de las crisis sutiles en la naturaleza del conocimiento que algunos nominan como la crisis ontológica del conocimiento moderno o  de la universidad decimonónica.  Las casas de estudio venezolanas aun tienen retos más “banales” o concretos que las contradicciones epistémicas, etc. 
El riesgo a la ruptura y arrase de los pequeños espacios de institucionalidad  creados históricamente por los venezolanos, por un movimiento que su naturaleza de ser, estar y hacer es autoritaria y con vicios totalitarios. Los universitarios tenemos 15 años en amenaza total.
Ya las condiciones objetivas dictan como hemos sido desgastados por las dificultades concretas, un estudiante con la beca paga 6 almuerzos al mes, un profesor contratado con su sueldo solo paga el condominio de su edificio, en caso ser sortario y  tener casa propia, si no, ni hablar. 
Por tanto podemos sostener que la Universidad venezolana, junto a una brava sociedad en resistencia atomizada mas allá de las elecciones, es el símbolo de la libertad que nos separa del terror de un Gobierno-Estado que su naturaleza es destructiva, delincuencial, corrupta y con vicios totalitarios tomados prestados por el pragmatismo de su líder histórico a unas izquierdas ortodoxas que sufren de su diagnóstico principal: un brutal falsa conciencia, son víctimas de su propia evaluación sobre los hombres.
Hoy salimos de ciertos respiros, que supusieron decisiones colectivas que sobrepasaron la atención nacional a la universidad. Hoy que los universitarios volvemos a estar en una encrucijada que determinara los caminos de la nación. Las casa de estudio se han ido a paro por no poder sostener el deterioro de una económica y condiciones objetivos imposibles para la creatividad, investigación, etc. Por el acecho de los cazadores de rapiñas, unos estudiantes se va a huelga de hambre, otros caminamos por la lucha activa de calle, pronto, muy pronto llegara el momento de jugárselas todas ante el avance inquisidor contra el pensamiento libre.
Llegará el momento de lucha contra nuestra versión roja de “Muera la inteligencia” “Viva la muerta” endulzada con la informalidad del trópico pero de la misma naturaleza.
La imagen: Un joven  afecto al régimen restregando una y otra vez una pancarta reivindicativa salarial por sus bolas frente a tres mil personas protestando por las Condiciones Univeritarias.
Criminalización de la protesta, persecución sistemática, grupos encargados internamente de ser un “Gran hermano” dispuesta a desatar el terror ante la voz de la disidencia, ante la voz de lo diferente.
Hoy los universitarios como símbolo, pero toda la sociedad venezolana tiene ante sí una encrucijada histórica en la defensa de lo diferente, de la disidencia, del pensamiento libre, de la posibilidad de construir una sociedad en armonía con las mejores caras de nuestras tradiciones, cultura. Con potencias de transformación, con una premisa fundamental, el respeto al otro absoluto y la libertad de disentir en lo que desees.
Ya algunos universitarios no pueden pensar en ir a la universidad solo a formarse en alguna disciplina, porque esta amenazado precisamente la condiciones del ejercicio de nuestra disciplina, no habrá un marco del ejercicio profesional.
Hace pocas horas los profesores de la APUCV en una consulta han decidido ir a paro indefinido. A pesar de las serias diferencias que encuentro en esa decisión y estrategia de lucha, es una gremio autónomo y  con numerosas razones para tomar tales resoluciones.
Ahora nos queda recorrer toda nuestra geografía informando, dando clases en nuestras calles, con nuestros ciudadanos, denunciando la inquisición de la que somos objeto y defender los espacios de nuestra universidad realizando actividades de formación, información y diagnostico de nuestra realidad. A pesar del paro  , debemos estar despiertos en la calle, en nuestros jardines,  recorriendo nuestras ciudades y barrios revelando la persecución a la universidad.
Les recuerdo a los ciudadanos de esta republica que algunos decidieron estar del lado de los opresores otros del lado de los oprimidos, unos una causa ignominiosa, otros una causa justa y libertaria.
Francisco Calderón Alcalá-

martes, 4 de junio de 2013

¿La última universidad?



¿La última Universidad?
Todos sabemos que cualquier ciudadano con un trabajo intermitente e informal gana varias veces más que un profesor universitario, mejor dicho cualquier ciudadano gana mejor que un profesor universitario. Profesor formado durante toda su vida que ha dedicado sus horas buenas y malas a convocar el conocimiento para reproducirlo y trasmitirlo a mentes frescas dispuestos a mantener esta institución humana que es la formalización del aprendizaje riguroso y la búsqueda de las complejidades del mundo humano y físico.
La universidad en Venezuela se ha erigido históricamente  como espacio y escenario de luchas encarnadas por los horizontes que debe tener el Estado y un poco más sutil la sociedad venezolana. Sabemos que los destinos de una sociedad no pueden ser decretados, a diferencia  de los Horizontes del Estado que  pueden ser dibujados. En algunos momentos las Universidad fue nicho de fundamentalismos políticos, sin embargo si hacemos un balance histórico más allá de las formas, podemos decir, que su ontología es libertaria y anti-hegemónica,  las experiencias históricas con cualquier gobierno lo sustentan.
A pasar de las crisis sutiles en la naturaleza del conocimiento que algunos nominan como la crisis ontológica del conocimiento moderno o  de la universidad decimonónica.  Las casas de estudio venezolanas aun tienen retos más “banales” o concretos que las contradicciones epistémicas, etc. 
El riesgo a la ruptura y arrase de los pequeños espacios de institucionalidad  creados históricamente por los venezolanos, por un movimiento que su naturaleza de ser, estar y hacer es autoritaria y con vicios totalitarios. Los universitarios tenemos 15 años en amenaza total.
Ya las condiciones objetivas dictan como hemos sido desgastados por las dificultades concretas, un estudiante con la beca paga 6 almuerzos al mes, un profesor contratado con su sueldo solo paga el condominio de su edificio, en caso ser sortario y  tener casa propia, si no, ni hablar. 
Por tanto podemos sostener que la Universidad venezolana, junto a una brava sociedad en resistencia atomizada mas allá de las elecciones, es el símbolo de la libertad que nos separa del terror de un Gobierno-Estado que su naturaleza es destructiva, delincuencial, corrupta y con vicios totalitarios tomados prestados por el pragmatismo de su líder histórico a unas izquierdas ortodoxas que sufren de su diagnóstico principal: un brutal falsa conciencia, son víctimas de su propia evaluación sobre los hombres.
Hoy salimos de ciertos respiros, que supusieron decisiones colectivas que sobrepasaron la atención nacional a la universidad. Hoy que los universitarios volvemos a estar en una encrucijada que determinara los caminos de la nación. Algunas casas se fueron a paro por no poder sostener el deterioro de una económica y condiciones objetivos imposibles para la creatividad, investigación, etc. Por el acecho de los cazadores de rapiñas, unos estudiantes se va a huelga de hambre, otros caminamos por la lucha activa de calle, pronto, muy pronto llegara el momento de jugárselas todas ante el avance inquisidor contra el pensamiento libre.
Llegará el momento de lucha contra nuestra versión roja de “Muera la inteligencia” “Viva la muerta” endulzada con la informalidad del trópico pero de la misma naturaleza.
La imagen: Un joven  afecto al régimen restregando una y otra vez una pancarta reivindicativa salarial por sus bolas frente a tres mil personas protestando por las Condiciones Univeritarias.
Criminalización de la protesta, persecución sistemática, grupos encargados internamente de ser un “Gran hermano” dispuesta a desatar el terror ante la voz de la disidencia, ante la voz de lo diferente.
Hoy los universitarios como símbolo, pero toda la sociedad venezolana tiene ante sí una encrucijada histórica en la defensa de lo diferente, de la disidencia, del pensamiento libre, de la posibilidad de construir una sociedad en armonía con las mejores caras de nuestras tradiciones, cultura. Con potencias de transformación, con una premisa fundamental, el respeto al otro absoluto y la libertad de disentir en lo que desees.
Ya algunos universitarios no pueden pensar en ir a la universidad solo a formarse en alguna disciplina, porque esta amenazado precisamente la condiciones del ejercicio de nuestra disciplina, no habrá un marco del ejercicio profesional.
En estos momentos en el Aula Magna de la Universidad Central de Venezuela se está decidiendo si se va a paro indefinido.  Lo más probable es en los próximos días  la Universidad se vaya a paro indefinido. Unos juzgamos que no era la mejor estrategia, aun así,   La casa que vence la sombra, ya no puede solo lidiarla y seguir sobreviviendo, los últimos espacios institucionalizados de libertad se juegan su última carta, no las jugamos entendiendo los riesgos. Recuerdo que ante la opresión de nuestro ser, de la venezolanidad, todos los riesgos valen la pena.
Se ha decidió parcialmente:
1. La Asamblea de Profesores define "cese de actividades académicas UCV "y serán ratificadas en el  Referéndum Consultivo de Paro convocado por FAPUV.  Este Jueves 06 de Junio desde las 8 am a 7 pm en la sede del IPP. Organizado por APUCV.

2. No realizar evaluación y reprogramaciones en las distintas facultades UCV hasta que cese el conflicto de las universidades.

3. Realizar actividades concretas de calle todos los dias en protesta a la crisis universitaria.

4. Convocar Asamblea Intergremial en Aula Magna UCV

5. Se declara al Prof. Calzadilla Persona no grata en la UCV.


6. Unidad gremial entre estudiantes y profesores para tratar el conflicto.

7. Impulsar una asamblea de egresados UCV

8. Voto de censura al Prof. Miguel Alfonzo.

9. Actividades diarias dentro de la UCV de protesta: Clases magistrales, etc.
Ahora nos queda recorrer toda nuestra geografía informando, dando clases en nuestras calles, con nuestros ciudadanos, denunciando la inquisición de la que somos objeto y defender los espacios de nuestra universidad realizando actividades de formación, información y diagnostico de nuestra realidad. A pesar de si se concreta el paro indefinido o no, debemos estar despiertos en la calle, en nuestros jardines,  recorriendo nuestras ciudades y barrios revelando la persecución a la universidad.
Les recuerdo a los ciudadanos de esta republica que algunos decidieron estar del lado de los opresores otros del lado de los oprimidos, unos una causa ignominiosa, otros una causa justa y libertaria.
Francisco Calderón Alcalá-